El mes de agosto es el mes en el que la mayoría nos vamos de vacaciones. La puesta a punto de nuestro vehículo antes de salir, si es que hemos elegido ese medio de locomoción es pues indispensable. Incluso si pensamos dejar el coche parado una larga temporada es mejor revisarlo antes ya que cualquier problema se agrava si no se le da uso. Y los neumáticos son uno de estos puntos a revisar ya que también pierden prestancia al estar parados.

Pero si hacemos carretera el neumático se convierte en una prioridad al ser lo único de nuestro vehículo que está en contacto con el asfalto. Un buen mantenimiento nos puede salvar de un accidente.

Aún así todos los conductores se enfrentan en alguna ocasión al temido pinchazo. Material cortante, un volantazo contra el arcén o una acera…hay varios motivos por los que se puede pinchar el neumático y, aunque normalmente es profesional el que hace el cambio de rueda, es probable que tengamos que hacerlo nosotros mismos si nos pilla en carretera.

Antes de salir asegúrate de llevar una rueda de repuesto homologada y en buen estado, gato, chaleco reflectante, una llave de tubo (que suele estar donde la rueda de repuesto) y triángulos de seguridad. Unos guantes nos pueden salvar de acabar con las manos hechas un desastre.

PASOS A SEGUIR PARA CAMBIAR LA RUEDA:

1- Lo primero es mantener la calma e inmovilizar el vehículo en un lugar seguro y señalizar con los triángulos para evitar cualquier accidente. Ponerse el chaleco antes del salir del vehículo es indispensable para que otros conductores nos vean y evitar así accidentes.

2- Si tienes guantes lo segundo es ponérselos y preparar la llave de tubo con la que vamos a aflojar y sacar los tornillos que sujetan el neumático al vehículo. Una vez aflojados Y SIN SACAR puesto que podría soltarse la rueda, preparamos el siguiente paso.

3- Ahora usaremos el gato para elevar el vehículo. El gato tiene una ranura que debe colocarse sobre una muesca que el vehículo tiene en la parte inferior. Agáchate para localizarla para ello es mejor que te sitúes a ras de suelo. Si no la encuentras, consulta las instrucciones del gato en el caso de tenerlas y una vez que has colocado correctamente el gato empieza a girarlo poco a poco. Verás como se eleva la rueda.

4- Ahora puedes sacar los tornillos. Si los has aflojado bien podrás sacarlos con la mano y si aún están duros ayúdate con la llave. Asegúrate de no dejarlos por el suelo cerca de un agujero o alcantarilla. Perderlos sería catastrófico en este momento. Saca la rueda y prepara la de repuesto.

5- Coloca la rueda de repuesto. Asegúrate de que esté bien sujeta. Pon de nuevo los tornillos y apriétalos bien con la llave.

6- Guarda la rueda vieja en el lugar en el que estaba la de repuesto. Si no está muy estropeada el el taller podrían reparala. En cualquier caso NUNCA la dejes abandonada. En el caso de estar demasiado deteriorada en el taller se encargarán de ella como residuo.

7- Baja el vehículo con ayuda del gato. Guarda todas las herramientas tal y como estaban y no olvides llevar el coche al taller cuando regreses de tus vacaciones. La rueda de repuesto es solo temporal y no puedes circular con ella de forma habitual a no ser que la que hayas puesto tenga las mismas características que las que usa tu coche.

Esperamos haberte sido de utilidad y BUENAS VACACIONES!!